Emprendiendo en familia: dos historias de éxito

La familia es la unidad principal de la sociedad como la conocemos; asimismo, ha formado parte activa de la historia empresarial entendiendo que tradicionalmente ha sido la forma más común de iniciar un negocio. Como mencionan Josh Baron y Rob Lachenauer, esta dualidad ha logrado amplificar su impacto, aproximadamente constituyen entre el 80% al 90% de empresas del mundo y son la causa principal del crecimiento del empleo y el PBI.

A pesar de que las tendencias sobre el emprendimiento buscan engranar perfiles multidisciplinarios y profesionalizar la gestión, las familias emprendedoras continúan siendo la principal fuente de desarrollo económico, laboral y de innovación para el mundo. Según el Reporte Global de Emprendimiento (GEM por sus siglas en inglés) en su edición 2019 – 2020, señala que los principales motivos para iniciar una empresa están relacionados a:

  • Hacer la diferencia en el mundo.
  • Generar riqueza o elevados ingresos.
  • Continuar la tradición familiar.
  • Subsistencia laboral.

Sin embargo la autonomía e independencia sigue siendo una de las motivaciones universales al inicio de iniciar un negocio.

La teoría nos aproxima al estudio de las empresas familiares bajo una visión más corporativa, con temas relacionados a la sucesión o la inminente muerte del negocio; según Deloitte, menos del 30% de estos negocios sobrevive a la tercera generación, convirtiendo el tema en un foco atractivo para el análisis; sin embargo, toda corporación tiene un génesis y también acredita investigar al respecto.

La sociedad peruana se caracteriza por involucrarse activamente en la creación de iniciativas emprendedoras o pertenecer a un negocio autosustentable. Según el estudio elaborado por ESAN para la edición de GEM 2019, Perú ocupa la quinta posición a nivel mundial en cuanto a la tasa de emprendimiento en edad temprana; vale decir, la prevalencia de individuos en el rango de 18 a 64 años que se encuentran activamente creando una iniciativa de negocio o poseen y/o gestionan una propia empresa.

Al respecto, se realizó una investigación empírica, entrevistando a Zulema León y Giuseppe Cassinelli; fundadores de Maraná, productores de chocolate artesanales provenientes de la más fina selección del cacao peruano y, por otro lado, a Pamela Gonzales e Ivan Juscamaita, creadores de la marca AmbideXtro, spin-off de la empresa Delirio, habilitadores de transformación para las corporaciones en la era de la innovación e intraemprendimiento.

Los motivos del emprendimiento

Las principales motivaciones de la sociedad peruana para tomar la decisión de emprender se sitúan en la oportunidad que brinda el mercado para generar mayores ingresos; no obstante, la necesidad por sustentar la economía familiar tiende a ser otra de las grandes razones. Para Zulema y Giuseppe, después de haber recorrido el mundo durante sus estudios de postgrado por España, visualizaron juntos el objetivo de emprender.

Z: Cuando regresamos a Perú, nos reenganchamos al mundo corporativo porque queríamos capitalizar la maestría y surgieron oportunidades interesantes. Después de pasar unos años, despertó con fuerza la idea de ambos por iniciar un negocio. Queríamos formar una empresa en la cual le dedicáramos alma, corazón y vida. Analizamos tres alternativas donde una de ellas estaba el tema del cacao y chocolate. Ambos sentimos que nos enamoramos al 100% del proyecto porque cumplía todos los check a pesar que eran particulares de cada uno.

G: Tomar la decisión fue complicada, salíamos del corporativo, donde tienes cierta estabilidad y tu sueldo mal que bien llega todos los meses; pero, nos obligamos a salir de nuestra zona de confort. La coyuntura también fue importante para tomar el impulso; sin embargo, fue determinante viajar a los campos cacaoteros y conocer su funcionamiento, la historia detrás de cada trabajador, de cómo el cacao pacificó su zona, les permitió cambiar su vida; fue realmente revelador para nosotros, nos apasionó. Nos propusimos contribuir a que más agricultores puedan unirse y mantenerse en ese cambio, colaborando a transferir el valor de la cadena para que llegue a ellos.

Zulema y Giuseppe

La historia de Pamela e Ivan no es muy diferente, ambos también provenían del corporativo y su carrera profesional estaba en ascenso; sin embargo, una decisión familiar llevó a Pamela a tomar la iniciativa de emprender y combinar el rol de madre con el trabajo.

P: Emprender fue todo un reto, esto no era un hobbie, porque ya no cuentas con el respaldo de un trabajo dependiente, era una responsabilidad completa que mantendría a la familia. Quería construir con base a lo aprendido en mi experiencia profesional, dando un enfoque más humano a las empresas. Tras vincularme en mi trabajo con el concepto Human Centered Design y amar el concepto de la innovación, vi que existía una oportunidad para modificar todo lo que tradicionalmente se hacía en el corporativo.

I: Siempre tuve el espíritu de intraemprendedor, era lo que hacía desde años atrás de forma dependiente; sin embargo, sentía que aún no era libre de construir como yo quería, no podía cambiar el modelo de negocio porque dependía de la decisión de arriba y fue Pame quien me convenció en tomar la decisión de unirme y crear juntos el concepto de AmbideXtro.

Pamela e Ivan

P: Sabía que las capacidades de Ivan serían muy bien aprovechadas para llegar a más clientes y fortalecer el concepto de la empresa.

El miedo a emprender

Las corporaciones valoran todo el conocimiento aprendido mientras emprendes a pesar de que el negocio haya fracasado, eso te da más valor para los empleadores porque sabes cómo lidiar con la frustración.

El emprender es una actividad agotadora, muchas veces frustrante y con un alto riesgo. Vulnerar la seguridad del flujo de ingresos o el temor de fracasar y no tener cómo cubrir sus necesidades muchas veces lleva a procrastinar la decisión. Zulema y Giuseppe mitigaron dicho miedo armando un plan de contingencia.

Z: Básicamente preguntamos a diferentes personas ligadas al área de recursos humanos sobre la posibilidad que un profesional que decidió emprender pueda regresar a trabajar de forma dependiente. La respuesta nos sorprendió porque a diferencia de lo que pensábamos inicialmente, las corporaciones valoran todo el conocimiento aprendido mientras emprendes a pesar de que el negocio haya fracasado, eso te da más valor para los empleadores porque sabes cómo lidiar con la frustración.

Además del aspecto económico, el emprendedor llega a apostar todo: activos, vida social, comodidades, lujos, descanso e innumerables variables que forman parte de su estilo de vida. En el caso de los fundadores de AmbideXtro esta realidad no fue ajena:

P: Aposté todo, mis ingresos, vendí mi auto, alquilé mi departamento, era necesario comprender que en el emprendimiento no hay tiempo para juegos; de esta forma, logré generar una renta para cubrir los gastos recurrentes y cierto colchón para seguir adelante con el proyecto.

I: Lo cierto es que emprender te cambia todo y vamos a decirlo así de fácil, si te toca comer arroz con huevo, ese será tu almuerzo favorito en adelante.

Ambas familias priorizaron el aspecto económico como el principal obstáculo para emprender, además, agregaron que el crecimiento profesional los dirigió a la zona de confort; sin embargo, el apasionamiento y amor por la oportunidad vinculada a las actividades seleccionadas para su propio negocio, permitió que la decisión tome un rápido impulso, siendo conscientes como bien lo señala Giuseppe que “el emprendimiento = actitud y trabajo”.

¿Cómo manejar el liderazgo en el negocio familiar?

Las métricas sobre los negocios familiares apuntan a llevar la sucesión en una segunda o tercera generación, aunque muchas veces se torna difícil, esto debido a que la posesión del negocio se va diluyendo entre diferentes miembros de la familia, quienes no necesariamente comparten los mismos planes. El estudio realizado por Deloitte señaló que solo el 35% de los 791 directivos encuestados afirmaron que los objetivos empresariales y familiares coincidían.

Este efecto de dilución sobre el objetivo o la visión de negocio se pierde cuando el patriarca deja la organización. Esto se da por el efecto multiplicador sobre la ampliación de la descendencia; en el supuesto que existan dos herederos y estos logren formar una unidad familiar, en algún momento podría existir 4 personas que influyan sobre las decisiones del negocio, con necesidades y motivos diferentes.

Pero este inconveniente es inherente al negocio, solo que su dimensionamiento o capacidad de negociación finaliza con la decisión de dos personas cuando a emprendimiento nos referimos, considerando que son los únicos propietarios de la empresa; sin embargo, los fundadores no dejan de ser tan humanos y sentir exactamente lo mismo que las futuras generaciones, cuentan con necesidades y motivos diferentes a pesar de ser una pareja, al respecto Pamela e Ivan comentan que la mejor forma de tomar una decisión es someterla a voto pero respetando los roles asumidos.

I: Es necesario entender que cada uno asume su rol en la empresa y es responsable por cumplir con los objetivos trazados; sin embargo, es necesario entender que somos un equipo y que con una comunicación constante vamos a potenciar la marca. Es necesario ser consciente de las capacidades de cada uno entendiendo que, como versa el dicho “zapatero a sus zapatos”.

P: Siempre van a existir desacuerdos en las decisiones que se tomen, pero se debe respetar el punto o llevarlo hacia un voto dirimente o la recomendación de un tercero. En el caso de Delirio, la empresa nació antes de conocer a Ivan y junto con mi hermana fuimos las primeras propietarias. De esta manera, cuando necesitamos llegar a un consenso sobre la ruta que tomará la empresa, compartimos la decisión entre todos.

Por otro lado, debido a que los sentimientos o necesidades de la unidad familiar son una variable con un peso importante al tomar una decisión; vale decir, no pueden ser separadas de la ecuación, muchas veces es necesario recurrir a una tercera opinión para lograr obtener un enfoque sin sesgo. Al respecto Zulema y Giuseppe suelen llevar esta práctica a cabo para evitar equivocarse al momento de decidir.

G: Es muy importante entender cuáles son las capacidades de cada quien, en nuestro caso nos complementamos muy bien incluso desde la época en la cual estudiábamos juntos y hemos sabido construir el negocio con base en la comunicación y el respeto por el rol que cada quien asume.

Z: Siempre existirán puntos de coincidencia y discordancia. Algo que solemos hacer cuando no llegamos a un acuerdo es consultarlo con un tercero y respetar la decisión que se tome. Además, siempre nos gusta revisar los errores para tenerlos claros y aprender que cosas hacer y qué no.

La sinergia de la vida familiar y el negocio

Un cliché familiar es recitar la frase “no se debe llevar los problemas del trabajo a la casa y viceversa”, pero, ¿realmente es posible?, enfoques antropológicos de la organización detallan que, tan importante como cuidar de las relaciones construidas en el día a día de la empresa, también debe incluirse el ámbito familiar de cada uno de los colaboradores, puesto que nunca se deja de ser: padres, hijos o abuelos.

Posterior a la revolución industrial, los cambios en la forma de trabajar separaron temporalmente y físicamente los roles de los actores de una unidad familiar, emparejándose la situación en los últimos 20 años. Para Casas, et al, las condiciones subjetivas a la calidad de vida de las personas radican en la congruencia de la interacción en ambos ámbitos. El consenso académico sitúa a la familia como núcleo de satisfacción de necesidades materiales, cognitivas y afectivas. Barraca & López-Yarto señalan que particularmente corresponde a un mundo intensamente emocional, donde los sentimientos son recogidos por cualquier medida de satisfacción.

A pesar de colocar como objetivo el separar ambos ámbitos físicos y temporales, las emociones y conductas se transmutan, así lo indica Staines en el modelo Spillover. Sin embargo, otros postulados refieren a la compensación de los escenarios, donde la actitud y el esfuerzo del individuo marca la pauta diferencial. Finalmente, tratar de alcanzar un punto intermedio aparenta ser lo más coherente, Clarck lo explica a través de su Border Theory, cuyo postulado radica en el equilibrio.

Pamela e Ivan señalan diferentes anécdotas sobre la forma de trabajo de cada quién y la oportuna compatibilidad de caracteres entre ambos.

I: Trabajamos de la forma más profesional, pero en el momento que no llegamos a un punto de concordancia, sabemos que lo oportuno es realizar una pausa y respirar para poder manejar los problemas.

Por su parte, Zulema y Giuseppe intentan no mezclar los ámbitos de la vida familiar y laboral lo cual ambos consideran que no es una tarea fácil, siempre existen situaciones estresantes y frustraciones que deben trabajar en conjunto.

G: Cada vez que nos enfrentamos a un problema, recordamos nuestras metas y procedemos a escucharnos. Los dos somos muy tercos pero el respeto y la comunicación es vital. Efectivamente, nosotros intentamos no mezclar la vida personal con la laboral y muchas veces los tiempos de desconexión son importantes, ventaja que no tienes cuando trabajabas de forma dependiente, donde debes intentar sonreírle a alguien para que considere darte el permiso necesario.

Separando las finanzas de la familia y de la empresa

Considerando que la realidad de nuestro país sitúa que los motivos para emprender son básicamente dos: tomar una oportunidad del mercado o por subsistencia, se torna imprescindible separar la “billetera” de la empresa con la de los propietarios. Como lo comentaban ambas familias, si bien el sacrificio económico y del estilo de vida que llevaban bajo la zona de confort se vio afectada, el reto era lograr igualar el costo de oportunidad dejado atrás.

Para Zulema y Giuseppe, fue trascendental tener claros los objetivos en función al mayor beneficio de la empresa.

Z: Nos tomó casi un año poder decidir emprender, después de mucho análisis y descubrir esa pasión por el chocolate, la historia de los campesinos y la posibilidad de contribuir con este ecosistema. Trazamos los objetivos de la empresa y nos fijamos en siempre buscar el mayor beneficio para Maraná, era como nuestro hijo.

G: La clave siempre ha sido ser ordenados y responsables con las finanzas. Es muy fácil confundir la economía de la familia y de la empresa si no tienes las cosas claras. Decidimos colocarnos un sueldo desde el comienzo, aunque muchas veces sentíamos que más bien nosotros le pagábamos a Maraná.

Por otro lado, Pamela ya tenía una empresa en funcionamiento y logró convencer a Ivan por arriesgar y combinar su talento para vivir con apasionamiento su profesión, pero haciéndolo como ellos se sentían más libres.

P: Definitivamente tenía una gran responsabilidad económica y no me podía dar el lujo de jugar a emprender. Algo que me motivó y lo cuento constantemente como anécdota, fue que mis hijas me dijeron “no te preocupes mamá, si no nos va bien, compramos una fotocopiadora y nos ponemos a sacar copias”, eso me dio mucha más fortaleza para continuar adelante.

I: Le comentaba a Pamela que no podía dejar de ganar lo que había alcanzado; sin embargo, ella confió plenamente en mis capacidades y me convenció que lo lograríamos juntos. Nos fijamos llegar a igualar nuestro costo de oportunidad como trabajadores dependientes y ajustar nuestros gastos.

Inversión, desarrollo y crecimiento

Nos apoyamos mucho en la incubadora de la Universidad del Pacífico; Emprende UP, quienes nos enseñaron todos los temas concernientes a la valorización de una empresa y la forma de negociar con los potenciales inversionistas.

Contar la historia de Maraná y AmbideXtro es un claro ejemplo de la incertidumbre y riesgo que se asume al momento de emprender; sin embargo, colocando en una balanza lo ganado, ambas familias supieron encontrar el horizonte para lograr mantener la empresa por más de 5 años, pasando esa fatídica estadística del año de vida. Hoy, ambos negocios ambicionan proyectos muy importantes para expandirse a nivel internacional, no obstante la situación actual desencadenada por la pandemia, han logrado acomodarse y sacar adelante ambos negocios.

Para el caso de Maraná, como decisión de dar el siguiente paso en el escalamiento del negocio, decidieron buscar un potencial inversionista que colaborara con dicho fin.

Z: Era muy difícil pensar en desprenderse de una parte de algo que tú mismo habías creado y por momentos nos aferrábamos a dicha idea, de continuar el camino solos y seguir sacando el negocio adelante, pero para dar el siguiente salto, era necesario tener una visión global. Nos apoyamos mucho en la incubadora de la Universidad del Pacífico; Emprende UP, quienes nos enseñaron todos los temas concernientes a la valorización de una empresa y la forma de negociar con los potenciales inversionistas.

G: No queríamos un inversionista que solo nos diera dinero, y ese tal vez era el temor, quién nos tocaría como socio. Afortunadamente encontramos a la persona adecuada, con quien logramos entablar una sinergia de ideas y donde prevalecía la confianza de las partes para sacar el negocio adelante.

AmbideXtro por su parte ha conseguido propuestas muy atractivas para realizar un proceso de adquisición del talento de la empresa; sin embargo, después de horas de análisis, decidieron continuar el proceso de crecimiento bajo una modalidad de franquicia capitalizando las oportunidades que se vienen presentando.

P: Nuestro proyecto es ambicioso y pensamos incorporar personas claves para nuestro proceso de expansión. Este año estamos iniciando operaciones en el mercado de Ecuador y próximamente, estaremos llegando a México. Hemos validado que nuestro modelo es compatible con las diferentes economías de Latinoamérica.

Familias con visión

Tanto Maraná y AmbideXtro demostraron tener las cosas claras desde un inicio. Evidencian que los pilares del manejo del negocio y la familia son la confianza, comunicación y el respeto. A pesar que los entrevistados dijeron que todavía no habían logrado alcanzar la meta trazada, como amigo de ambas familias puedo decir que lograron lo que se propusieron, “con la mirada en las estrellas, pero los pies en la tierra”. Zulema, Giuseppe, Pamela e Ivan, son el vivo ejemplo que el emprendimiento corresponde a una actitud, en la que, si mezclas las variables adecuadas para que tu modelo de negocio funcione, el éxito llega por sí solo.

Ficha Técnica:

Categoría: Chocolate Artesanal Premium

Fundadores: Zulema León y Giuseppe Cassinelli

Fundación: 2014

Mercados: Perú, Estados Unidos, Bélgica, Luxemburgo, República Checa, España, Reino Unido, Holanda y Japón.

Etapa: Escalamiento

Proyectos: Nuevas líneas de chocolate artesanal premium


Categoría: Servicios Corporativos – Habilitadores de Transformación.

Fundadores: Pamela Gonzales e Ivan Juscamaita

Fundación: 2014 – Delirio S.A.C | 2018 – AmbideXtro

Mercados: Perú, Ecuador

Etapa: Crecimiento

Proyectos: AmbideXtro México

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